
¿Qué son las cervezas nitrogenadas?
Básicamente las cervezas nitrogenadas reemplazan el CO2 inherente en todas las cervezas con N2. Esto les da un aspecto mucho más brumoso, un gran cuerpo y una corona de espuma basta y cremosa, pero ¿cómo funciona?
El CO2 es una reacción directa de la fermentación de la cerveza. La levadura, que está formada por pequeños organismos, se come el azúcar del mosto cervecero, lo que ocasiona que estos pequeños excreten alcohol y al mismo tiempo, carbonaten la cerveza.

Cuando a las cervezas se les adiciona Nitrógeno, pierden 70% de CO2, lo que les da una textura cremosa.
Dependiendo de la temperatura y la presión del CO2 resultante, la cerveza puede estar sobre carbonatada, carbonatada a medias o tener el nivel exacto de carbonatación. Por eso es muy importante mantener las cervezas a una temperatura que se adecúe a su tipo de fermentación.
Las cervezas nitrogenadas se carbonatan como cualquier otra cerveza, la diferencia llega al momento de embotellarlas, enlatarlas o servirlas, cuando son infusionadas con nitrógeno, lo que se deshace en un 70% del CO2 y ocasiona que la cerveza tenga una textura más cremosa y suave al contacto con el paladar.

Los estilos cerveceros que más se benefician del nitrógeno son las variaciones de las Stout y Porter.
Desgraciadamente, no todos los estilos cerveceros se benefician de la infusión de nitrógeno. Por ejemplo, las India Pale Ale pierden sus aromas florales y algunas de sus notas, mientras que las Pilsner pierden su característico cuerpo suave.
Las cervezas que más se benefician del nitrógeno son las variaciones de las Stout y las Porter. Así que si alguna vez quieres probar la diferencia, te recomendamos una Milk Stout o una Baltic Porter nitrogenadas.